El trabajo de un recepcionista de hotel
Como recepcionista de hotel, eres la cara pública del negocio, por lo que tener confianza y profesionalidad en ese papel es vital si quieres que tu carrera progrese. Los empresarios del sector hotelero buscan personal de recepción que pueda trabajar con eficiencia y eficacia, y que pueda relacionarse bien con los clientes para atraer clientes habituales. Estudiar un curso de recepcionista de hotel te ayudará a aprender o desarrollar estas habilidades.
Tanto si eres nuevo en el puesto de recepcionista, como si ya tienes experiencia, la formación de recepcionista de hotel puede ayudarte a desarrollarte y conseguir un empleo o un ascenso.
Ser una figura destacada en tu hotel puede reportar a tu empleador clientes recurrentes si no sólo eres bueno en tu trabajo, sino que además estás dispuesto a mejorar y ofrecer un excelente servicio al cliente en todo momento.
Un recepcionista de hotel, también llamado a veces empleado de recepción de hotel, es una persona que trabaja saludando y ayudando a los huéspedes. Los recepcionistas suelen encargarse de todo, desde ayudar a la gente a hacer reservas hasta gestionar las habitaciones disponibles, entregar las llaves de las habitaciones y resolver cualquier problema que pueda surgir durante la estancia. En la mayoría de los casos, es la primera persona con la que interactúan los huéspedes en el hotel, lo que hace que su función tenga cierta importancia.
Como recepcionista de hotel, atenderás consultas y reservas de habitaciones por teléfono, Internet o correo electrónico.
Los recepcionistas suelen utilizar un sistema informatizado para registrar las entradas y salidas de los clientes. Entregas llaves o tarjetas llave a los clientes. A continuación, o bien les das indicaciones claras para llegar a su habitación, o bien alguien les acompaña hasta su alojamiento.
Es importante que causes una buena primera impresión: una cálida bienvenida y un ambiente agradable en la zona de recepción pueden contribuir a que la estancia de los huéspedes comience de la mejor manera posible.
Llevas un registro preciso de los huéspedes que han llegado al hotel o lo han abandonado. Te aseguras de que toda la información necesaria llegue a los departamentos de limpieza, restaurante, mantenimiento y gestión.
Proporcionas a los huéspedes información sobre las atracciones locales y los lugares de interés. Puedes prestar servicios adicionales para comodidad de los huéspedes, como pedir periódicos o taxis, guardar objetos de valor y tomar recados.
Te aseguras de que los huéspedes reciban sus mensajes sin demora, junto con el correo que pueda llegarles. Algunos recepcionistas de hotel manejan la centralita, dirigiendo las llamadas entrantes y ayudando a los huéspedes a hacer llamadas externas.
Los recepcionistas de hotel preparan la cuenta de un cliente cuando abandona su alojamiento. Juntas el coste de artículos adicionales como bebidas, llamadas telefónicas y periódicos, y los incluyes en la factura final. Cobras al cliente en efectivo o con tarjeta de crédito/débito. Algunos recepcionistas de hotel también pueden cambiar divisas.
Los clientes pueden acudir al recepcionista de hotel con cualquier duda o queja, no todas fáciles de resolver.
Los recepcionistas a menudo tienen que utilizar sus habilidades de venta para convencer a los clientes de que cojan una habitación mejor y más cara, que se queden más tiempo, que utilicen los servicios del hotel como el restaurante, el spa y las instalaciones de ocio, o que aprovechen una promoción especial para ayudar a aumentar los ingresos del hotel. También puedes hacer reservas y concertar citas para estas instalaciones.
En caso de emergencia, los recepcionistas de hotel pueden tener responsabilidades como ayudar a las personas a evacuar el edificio, llamar a los servicios de emergencia y comprobar que todos los huéspedes están a salvo.
A veces, los recepcionistas de hotel también pueden vivir en el hotel donde trabajan. En los hoteles pequeños, pueden tener otras funciones, como servir en el bar o el restaurante o ayudar en las tareas domésticas. Algunos recepcionistas de hotel llevan uniforme.
Algunos recepcionistas de hotel que trabajan en un turno de noche pueden contar el dinero que se ha hecho ese día y guardarlo en la caja fuerte para que el jefe de turno lo lleve al banco.
Cada trabajo requiere unas cualidades específicas. Así pues, exploremos qué cualidades debes alcanzar para ser recepcionista de hotel.
La empatía es la habilidad fundamental para cualquier recepcionista de hotel. Es importante comprender al huésped, su enfoque, su emoción y su tiempo ocupado. Cuando llega un huésped, puede estar cansado, hambriento o molesto. Como recepcionista de hotel, serás la persona encargada de darles una cálida bienvenida, preguntarles cómo se sienten y saludarles con una sonrisa.
Comprende sus necesidades y su situación y dales recomendaciones en consecuencia. Sin mostrar la empatía adecuada no podrás ganarte el corazón de tus huéspedes ni su satisfacción. Así que empieza a crear empatía hacia los demás y prepárate para el trabajo de recepcionista de hotel.
La comunicación es la parte fundamental del trabajo de recepcionista. Tu principal responsabilidad es relacionarte con el huésped. Los ingresos del hotel, las buenas críticas de los huéspedes, su satisfacción, casi todo depende de tu comunicación.
Con tus agradables dotes de comunicación, puedes convertir a un huésped difícil en uno leal y puedes añadir un servicio extra para el huésped y añadir ingresos extra para el hotel en el que trabajas. Sólo tu buen enfoque y tu comunicación verbal pueden hacer que el hotel tenga muchos huéspedes que vuelvan. Por tanto, para tener éxito como recepcionista de hotel, debes ser muy bueno en comunicación.
Para ser una recepcionista de hotel de éxito, tienes que dedicarte y apasionarte por tu trabajo. Debes tener una mentalidad positiva hacia el trabajo para ir más allá. Tu trabajo no consiste en contestar al teléfono, sino en mantener la reputación del hotel.
Así pues, cuanto más dedicación y pasión muestres por el trabajo, más podréis crecer tú y el hotel. Puedes convertirte en la estrella del hotel y, con el tiempo, ascender en la escala profesional.
No todos los días en la recepción serán iguales. Puede variar de un día a otro. Por ejemplo, en temporada alta, puede que tengas que atender a un gran número de huéspedes. Sin embargo, en temporada baja, puede que tengas que atender a 1 o 2 huéspedes o a ningún huésped en un día.
Durante una temporada alta, es importante mantener la calma y gestionar las consultas de los huéspedes, contestar al teléfono y gestionar sus problemas. No puedes saltarte ninguno, no puedes ignorar a nadie, todo lo que tienes que hacer es gestionarlos sin problemas. Por eso necesitas un nivel muy alto de habilidades para gestionar el estrés.
Tu energía es tu baza en el trabajo. En tu comunicación, actividad y gestión de asuntos, el único requisito es tu energía. Si tienes una bolsa llena de energía podrás conseguir el éxito más rápidamente. Pase lo que pase, no puedes mostrar ni un solo signo de cansancio o fatiga, no puedes parecer pálido e infeliz.
Durante tu trabajo, tienes que servir con una sonrisa agradable y energía. Sólo así podrás dar una cálida bienvenida al huésped y aumentar la reputación del hotel. Por tanto, cuanto más enérgico te mantengas, más éxito obtendrás en el trabajo de recepcionista de hotel.
El sector de la hostelería está estrechamente relacionado con el de los viajes. No todo el mundo, pero sí la mayoría de los huéspedes, reside en un hotel para viajar. La mayoría de los huéspedes no tienen conocimientos adecuados sobre la zona local. Por eso prefieren preguntarte a ti.
Esto se debe a que eres de confianza para ellos. Así que pueden pedirte sugerencias. Como recepcionista, es tu deber sugerirles el lugar adecuado, las vistas hermosas. Por eso, es imprescindible que conozcas la zona. Por tanto, conoce tu ciudad antes de empezar a trabajar como recepcionista de hotel.
Una de tus tareas importantes como recepcionista de hotel es hacer que el huésped se sienta cómodo. Puedes hacerlo comprendiendo sus necesidades y tomando medidas proactivas.
Por ejemplo, cuando los veas cansados, puedes ofrecerles un zumo de cortesía; cuando veas a un huésped con niños, puedes ofrecerles los cuidados y servicios adicionales que tu hotel ofrece para ellos. Cada una de tus acciones proactivas conducirá a la satisfacción del huésped y aumentará la reputación del hotel.
Con un curso de recepcionista de hotel aprenderás a gestionar y organizar la recepción de cualquier establecimiento hotelero. Podrás iniciar una profesión en el sector de mayor peso económico y generador de empleo: el turismo. Aprenderás el trabajo de un recepcionista, tanto desde el punto de vista administrativo, como planificador y organizador, como desde el punto de vista de la atención al cliente.
Si quieres estudiar para ser recepcionista de hotel, aprenderás técnicas de recepción y orientación al cliente para ofrecer un servicio de calidad a los huéspedes del hotel, albergue juvenil, B&B o alojamiento turístico para el que trabajes.
Además, durante este curso, aprenderás los principales conceptos teóricos del turismo en España, uno de los sectores económicos más importantes de nuestro país. Abarcarás todas las tareas que implica trabajar en un hotel, desde la estructura y organización de un establecimiento hotelero hasta el funcionamiento de la recepción y la gestión de reservas, el proceso de pago e incluso la Ley Orgánica de Protección de Datos (LOPD).
¡Fórmate como recepcionista de hotel y aumenta tus posibilidades de empleo en empresas de alojamiento turístico como hoteles, albergues juveniles o pensiones!
Al finalizar un curso de recepcionista de hotel, tendrás varias opciones para desarrollar tu profesión en el sector del turismo y hostelería. Podrás trabajar como:
El salario de un recepcionista de hotel depende de varios factores, como la experiencia en el campo, el número de idiomas que hable y la categoría (número de estrellas o tamaño) de la cadena en la que trabaje.
Sin perjuicio de estas salvedades, varios sitios de búsqueda de empleo y salarios estiman el salario medio en unos 1.420 euros netos al mes. En un hotel grande, un recepcionista con experiencia puede ganar hasta 2.200 euros al mes.
El salario se adapta al convenio colectivo y, por tanto, al número de estrellas del hotel. Es obvio que a mayor número de estrellas, mayor salario. Pero en realidad, independientemente del convenio colectivo, un recepcionista de un hotel de una estrella puede ganar más que un recepcionista de un hotel de cinco estrellas.
Aquí, lo que cuenta es el valor, los conocimientos, la experiencia y la antigüedad de cada uno.
El conocimiento de idiomas puede ser un factor condicional y determinante para trabajar en un hotel de cinco estrellas. No ocurre lo mismo en hoteles con un número inferior de estrellas.